A lo largo de su vida en Pilar, han sido variadas nuestras relaciones con Don José Sánchez. En los últimos tiempos, como integrantes de la Junta de Estudios Históricos del Partido de Pilar, a la que en persona nos invitó, hemos compartido muchas situaciones que destacaban la historia local. Como verdadero organizador del estudio de la misma, han sido diversas las colaboraciones que Don José nos cedió y quiere Dios que para siguiente reseña, nos aportara algunos datos apenas cinco días antes de su fallecimiento.

Es por ello que hoy, en nuestro espacio habitual de la historia local, ofrecemos este sentido homenaje dando a conocer algunos datos del camino a Derqui; para el conocimiento y difusión de la historia, como él siempre lo deseaba.

El Camino a Derqui

La obra de "concreto-asfáltico" fue realizada en aproximadamente un año, mediante licitación pública por la empresa I.A.C.U.S.A. a un costo de $ 13.000.000 m/n.

La Inauguración definitiva de la pavimentación se realizó durante la gobernación del Dr. Oscar Alende, el domingo 7 de mayo del año 1961. Cerca del mediodía, el gobernador, acompañado por el intendente de Pilar, Juan Cirilo Sanguinetti, el Obispo de San Isidro, Monseñor Dr. Aguirre; el Ministro de Obras Públicas provincial Arq. Zubiri, el presidente de Vialidad Provincial, los concejales pilarenses Galeano (presidente del HCD), Casimiro Domínguez y Barreiro (*), entre otros; llegaron a Presidente Derqui para realizar el solemne acto de inauguración del camino; realizando sendos discursos, el Dr. Alende, el Intendente Sanguinetti y el Sr. Rivera Villate. Luego, intervinieron numerosas escuelas e instituciones del pueblo en un vibrante desfile.

Con el correr de los años ha sido una constante el reclamo por el cuidado de esta cinta asfáltica. Sabemos, por comentarios de antiguos vecinos, que en el año 1961 había formada una especie de "comisión" derquina para vigilar y controlar que se hicieran correctamente las obras del camino; pero a poco tiempo de su inicio en el mes de enero 1963, la revista derquina "Elevación" ya expresaba que existía honda preocupación en los medios locales por el estado del camino debido a su paulatina destrucción. Argumentaba que había un resurgimiento continuo de baches, con pérdida constante de piedra granza, por lo que se vislumbraba ruta para poco tiempo más. Como dato curioso, el medio derquino apelaba a la buena voluntad de los conductores de vehículos de tracción a sangre con llantas de hierro, para que circulen por la banquina, de manera de no romper el pavimento. Todavía eran años de profusa utilización de los inveterados sulkys.