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La agricultura en Villa Toro. Las quintas de verdura.
Panorama
histórico
La
agricultura en nuestro distrito tuvo los avatares propios de toda la
campaña bonaerense. Hagamos una sucinta reseña de los
temas agrícolas comunes para luego dedicarnos a las quintas de
verduras de Villa Toro.
Antes de la conquista, los guaraníes cultivaban sus productos
de huerta como zapallos, batatas, maíz, porotos, con su particular
manera de sembrar: solo "rozaban" la tierra, es decir, no
la removían mucho, solo lo necesario para colocar las semillas.
En la época colonial, los españoles introdujeron importantes
mejoras como el uso de herramientas metálicas y la rotación
de los cultivos para no degradar el suelo. Como ya dijimos, hicieron
una partición en dos de la campaña. Al sur y oeste de
Buenos Aires buscaron que los propietarios de tierras se dedicaran a
la ganadería y el norte lo reservaron para la agricultura. Eran
las "tierras de pan llevar". El pago de La Costa (San Isidro)
fue el fundamental baluarte para el abastecimiento de trigo a la ciudad
porteña. De todas formas, el trabajo de la tierra era despreciado
por las elites y hasta la alimentación a base de verduras era
mal visto.
Los productos sembrados en toda la zona eran similares: uva, melones,
sandías, maíz, trigo, cebada y muy pocas verduras como
el zapallo, ajo, papa, cebolla. Era sí importante el cultivo
de la alfalfa (elemental para los caballos) y los montes de duraznos
que además del fruto, producía la necesaria leña
para la cocina y calefacción.
Pero las cosechas eran discontinuas e irregulares. Las sequías
y los constantes ataques de la langosta hacían difícil
la producción en escala. De todas formas, los encargados de controlar
las cosechas eran los jueces de paz, quienes eran secundados por los
informes de los alcaldes de cuartel. El instrumento que se utilizaba
para las ventas y el control estatal, era la "fanega"; una
medida de capacidad que equivalía a 55,5 litros. Era también
una medida de superficie que equivalía a 65 áreas (poco
más de media manzana actual). Una fanega de trigo costaba alrededor
del año 1850 unos doscientos pesos de la época.
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Algunas cifras
de producción en Pilar
Tenemos pocos
datos de estos años para nuestro distrito. Según
el censo provincial de 1881, el partido de Pilar contaba con granjas
y huertas en una importante proporción, aunque predominaba
la industria del tambo. Se destinaban a la labranza 14.607 hectáreas.
Obviamente y como en todo el país, la cuestión cambió
radicalmente con la masiva inmigración europea. También
nuestro distrito se benefició enormemente con ello y los
nuevos brazos ayudaron a la agricultura local. En 1869 todo Pilar
contaba con 3708 habitantes. En 1881 eran 7169, de los cuales
202 eran españoles, 319 franceses y 1245 italianos; es
decir el 25 % de su población era extranjera. En el año
1890 el porcentaje subió al 34 %. Como la mayoría
se dedicaba a trabajar en quintas, esto aumentó el área
cultivada.
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Evolución del área cultivada en el Partido de Pilar, en
hectáreas:

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Quintas
de la Villa
Villa
Toro tenía como característica los grandes sembradíos
de verduras, que estaban destinadas prioritariamente al abastecimiento
de la Ciudad de Buenos Aires. No eran producciones de muchas hectáreas
y cientos de quinteros, pero si los suficientes para la cosecha de variados
productos de huerta y cereales. Debemos tener en cuenta que años
atrás, nuestro pueblo era "puro campo", apto para la
siembra y con muy escasos pobladores. Para ejemplo basta decir que la
"Gran Enciclopedia Argentina" de Diego de Santillan, en la
edición del año 1963, cita todavía a la Villa Toro
con una población de 434 habitantes.
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De los años de Antonio Toro, hay una interesante anécdota
para mencionar sobre la producción de alfalfa y maíz.
Don Federico Lacroze tenía una chacra de varios acres
en la villa, la que era explotaba económicamente en beneficio
de su Tramway Rural, sobretodo para la alimentación de
los animales. Lo cosechado era llevado a Buenos Aires y a la
vuelta, para no hacer volver vacíos los vagones, eran
llenados con el estiércol de los caballos que se utilizaba
en nuestro pueblo para los hornos de ladrillos y abono.
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Entre las quintas más recordadas, podemos citar a las de Bastita,
Pittaluga, Morra, Traverso, Allindo-Raberto
(estos últimos arrendaban parte del campo del Dr. Pagliere en
Toro hacia el año 1900), Sciacalugga, la que comenzaba
en el actual centro de Derqui, (intersección del paso a nivel
del FF.CC. Metropolitano y la Avda. de Mayo) y terminaba donde ahora
está el paso a nivel del FF.CC. Urquiza y la calle Quintana,
y la de Rosso, ubicada sobre el camino a José C. Paz.
Esta última tuvo una consideración especial en la publicación
del Diario La Nación del domingo 9 de diciembre de 1945. Allí,
en un suplemento especial sobre actualidad y letras, fotos de ésta
quinta ilustraban una nota periodística que traía estadísticas
sobre el ingreso de verdura a los mercados concentradores de la Capital
Federal. Así, se decía que en abril de ese año,
Buenos Aires había recibido de las quintas cercanas (entre las
que se contaban las de Presidente Derqui) más de 36 millones
de kilogramos en verduras. |

Parte de la nota publicada
en LA NACION el 9 de diciembre de 1945
Las fotos fueron obtenidas en la quinta de Rosso
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Fuentes:
- "La metamorfosis de San Isidro" por Pedro F. Kröptl.
Municipalidad de San Isidro. 1994.
- "Historia de la Provincia de Buenos Aires y formación
de sus pueblos". Ricardo Levene Volumen II.
- Censo de la Provincia de Buenos Aires, año 1881.
- Edición de La Nación del 9-12-1945.-
- Anécdota narrada por el Sr. Alberto Bernadez.
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